Un equipo de científicos de la Universidad Central de Queensland, de Australia, está investigando si es posible que los accesorios weareables puedan detectar los síntomas del COVID-19 en aquellos casos en que las personas no presentan signos visibles. Para ello, la institución se asoció con la empresa de tecnología en fitness WHOOP.
Los científicos pretenden investigar si existe una relación entre los cambios en la frecuencia respiratoria y los síntomas del COVID-19. Realizarán el estudio mediante la recolección de información biométrica obtenida por medio del WHOOP Strip 3.0, una pulsera con un sensor que posibilita el rastreo continuo del estado físico de los usuarios.
“Los datos de WHOOP pueden ayudar a identificar el coronavirus durante el período de incubación antes de que alguien se sienta enfermo”, dice Will Ahmed, fundador de la empresa. Los casos a estudiar serán solamente aquellos que opten por participar en esta investigación.
A su vez, el estudio extraerá datos de la aplicación WHOOP Journal que permite llevar un seguimiento diario en los comportamientos fisiológicos. La app fue lanzada el 9 de marzo e incluye al COVID-19 como una opción especial para que los usuarios supervisen sus síntomas.
Por otra parte, la Universidad de California en San Francisco, Estados Unidos, también está realizando un estudio similar que busca identificar el inicio temprano del COVID-19 a través del anillo inteligente Oura que permite registrar la temperatura corporal y otros signos vitales de los usuarios.
Para llevar a cabo el análisis, la UCSF les pedirá a 150.000 usuarios del Oura Ring que compartan sus datos médicos para que los científicos puedan desarrollar un algoritmo que pueda detectar las primeras etapas del coronavirus. Este equipo espera poder crear un dispositivo de detección temprana a finales de 2020.
Fuente: https://www.mercadofitness.com/